Aquí te pierdes en una selva bastante espesa. Pero te sorprendes cuando te das cuenta que la misma se encuentra repleta de gatitos salvajes pero muy sexuales. Con muchos deseos de follar. Así que definitivamente lo tomas como una grata sorpresa, con muchas ganas de tener sexo bien duro. Te aprovechas de cada una de las gatitas que van saliendo y le meterás tu polla erecta en su vagina húmeda. Las putitas no pueden parar de gritar del placer mientras son penetradas por tu verga bien dura y venosa. Hasta que finalmente te corres dentro de ellas, llenándolas de lechita caliente.